Los dispositivos de seguridad para los partidos de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones que se disputarán este miércoles en París y Madrid fueron reforzados tras las amenazas lanzadas por el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
Los encuentros que se disputaron el martes, el Real Madrid-Manchester City en la capital de España y el Arsenal-Bayern Múnich en Londres, no registraron incidentes destacados pese a la amenaza yihadista.
Publicados hace unos días en Internet, los mensajes amenazadores del EI no focalizaron la atención en un inicio hasta que el martes las autoridades de los países que acogían estos encuentros anunciaron refuerzos de las medidas de seguridad, en un contexto de riesgo de alerta muy elevado en Europa tras el último atentado ocurrido el pasado 22 de marzo en una sala de espectáculos de Moscú, en el que murieron 144 personas.
– Poco más de 100 días para los Juegos Olímpicos –
El martes, a poco más de 100 días para la inauguración de los Juegos de París, para los que la seguridad en uno de los principales quebraderos de cabeza, el ministro del Interior francés Gérard Darmanin anunció que la seguridad se había «reforzado considerablemente» para el partido de este miércoles entre el París SG y el Barcelona tras las amenazas yihadistas.
El delegado del gobierno español en Madrid, Francisco Martín Aguirre, anunció por su parte «un despliegue de seguridad extraordinario, acorde al nivel de alerta determinado por los servicios de inteligencia de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado», aunque al final se limitó a aumentar el número de policías en «más de 2.000 agentes» movilizados, por los 1.900 previstos inicialmente.
La policía metropolitana de Londres aseguró que cuentan «con un sólido plan» de seguridad alrededor del Emirates Stadium, donde tampoco se registraron incidentes durante el Arsenal-Bayern.
Las tres ciudades que albergan estos paridos de ida de los cuartos de final de la Champions (Madrid, Londres y París) sufrieron en el pasado atentados yihadistas muy sangrientos (en 2004, 2005 y 2015, respectivamente), con cientos de muertos.
– «Mátenlos a todos» –
Pese a que la amenaza es permanente, las autoridades de estos tres países no revelaron planes específicos de atentados sobre estos partidos, pese a que EI llamó a atacar los estadios de fútbol en los que se disputan los encuentros.
En uno de los mensajes amenazadores del EI, un combatiente, enmascarado y portando un fusil de asalto, posa delante de imágenes de los cuatro estadios que acogerán los encuentros, acompañado del mensaje: «Mátenlos a todos».
Estos mensajes proceden de Al-Azaim, el órgano del Estado Islámico en Jorasán (EI-K), la rama de grupo yihadista en Afganistán, que ya reivindicó el atentado de Kerman (Irán) de enero y se sospecha que también esté detrás del último ataque en Moscú, detalló a la AFP una experta francesa en la comunicación a través de internet de los grupos yihadistas.
Esta experta calificó de «incitativos» estos mensajes, siguiendo «el envalentonamiento de la esfera EI tras el golpe de efecto del atentado de Moscú».
Estas amenazas, no obstante, no parecieron perturbar a los jugadores de los equipos implicados, quienes ofrecieron dos encuentros de mucha calidad y goles (3-3 en Madrid y 2-2 en Londres).
«La seguridad es importante (…), pero tenemos que concentrarnos en lo que tenemos que hacer, jugar al fútbol», declaró el martes por la mañana el centrocampista portugués del PSG Danilo Pereira.
Tras el espectáculo suntuoso en el Santiago Bernabéu, el encuentro entre PSG y Barça también promete, en un duelo que se ha convertido en un clásico del fútbol europeo en los últimos años.
En París todavía duele la «remontada» de 2017, cuando el Barça de Messi y compañía ganó 6-1, con tres goles en los últimos minutos, para darle la vuelta a una eliminatoria que parecía sentenciada tras el 4-0 a favor de los franceses en la ida.
Este episodio, que tuvo réplicas en los años posteriores frente a Manchester United en 2019 y Real Madrid en 2022, traumatizó profundamente al club francés y tensó sus relaciones con el FC Barcelona, que vio como el PSG le arrebató a sus dos grandes estrellas de la época, el brasileño Neymar (2017) y el propio Messi (2021).
Incluso el pasado verano (boreal), el club que ahora entrena Luis Enrique Martínez, el técnico que llevó al Barça a ganar su última Liga de Campeones (2015), fichó a otra de las estrellas azulgrana, el francés Ousmane Dembélé.
El vencedor de esta eliminatoria se enfrentará al ganador del último cuarto de final, que enfrentará a Atlético de Madrid y Borussia Dortmund, dos equipos que aparecen como «outsiders» a estas alturas de la competición.